Estamos en plena diagramación de senderos, puesta a punto del Punto de Encuentro, construcción de sanitarios en el interior de la finca, en fin… nos falta ¡un montón! Pero tampoco dejamos de lado las tareas culturales de los viñedos. Así se llaman, “tareas culturales”. Y a medida que las realicemos te vamos a ir contando como es el proceso.
PODA
Por ejemplo, ya estamos entrando en la “cola” del invierno y es cuando la poda debe de estar en su tramo final. Generalmente por una cuestión de costos y logística la poda se realiza en la mayoría de los casos en pleno invierno. Es ahí cuando la madera de las cepas sufre más porque las temperaturas bajo cero de Mendoza hacen que los sarmientos tarden más en cicatrizar dejando muchas posibilidades de que la cepa contraiga enfermedades. Nos guiamos más por los consejos de los abuelos que por los libros y esto nos ha dado siempre espléndidos resultados. Podar la viña cuando el estado del tiempo sea benigno, los fríos tengan a la savia controlada bajo tierra y la Pachamama nos conceda su permiso para entrar en las hileras.
Una vez que la poda se lleve a cabo hay que sacar el sarmiento cortado de las hileras. Y es por eso que en esta semana muchos de esas ramitas secas colapsaran buena parte de los senderos. Pero la buena noticia es que con esos mismos sarmientos abasteceremos los hornos de barro que tendremos para hacer pan de campo, empanadas, carnes a la maza y tortitas caseras entre otras delicias rurales.